Dolor de Dientes

Uno de los dolores más fuertes y molestos que podemos sufrir es el dolor de dientes, resultando ser inoportuno e insoportable al punto de quitarnos el sueño y muchas veces logra desesperarnos.

Se produce por múltiples motivos por lo que debes acudir al estomatólogo para que determine la verdadera causa y ponga el tratamiento correcto en cada caso.

Si has pasado por una situación como esta de seguro querrás saber por qué se produce este dolor y qué puedes hacer para aliviarlo en casa mientras llegas a la clínica dental, sigue leyendo y no te arrepentirás.

¿Qué puede causar dolor de dientes?

Muchas son las causas que pueden desencadenar esta afección, pues debes saber que esta estructura anatómica tiene en su interior al nervio dentario que se conoce como pulpa dental.

Este nervio junto a sus terminaciones nerviosas es el responsable del dolor cuando se afecta, ya sea por infecciones, traumas, inflamaciones, etc.

Dentro de las causas más comunes del dolor de dientes tenemos:

Caries dental

Las caries constituyen la principal causa de dolor en los dientes y se producen por la mala higiene bucal que favorece la acumulación de restos de alimentos.

Las bacterias que normalmente viven en la boca también se acumulan formando una placa bacteriana que se adhiere a la superficie de los dientes.

Dichas bacterias se alimentan de los azúcares y almidones de la dieta y forman un ácido que deteriora los tejidos del diente (esmalte y dentina), originando las caries.

Cuando esto ocurre se forma una cavidad que a su vez sirve de reservorio a más bacterias que continúan deteriorando el diente hasta destruirlo completo si no se elimina a tiempo.

El principal síntoma de caries es el dolor de dientes al comer alimentos dulces, fríos o muy calientes, además de que puede manifestarse con una mancha de color marrón, amarillo o blanco.

Obturaciones defectuosas

Cuando se fracturan las obturaciones o no se realizan correctamente, pueden filtrar los alimentos que comemos originando dolor, sobre todo los líquidos fríos, calientes y los dulces.

Absceso dental

La acumulación de pus en forma de saco o bolsa como causa de una infección bacteriana se conoce como absceso, en el caso de los dientes puede localizarse en cualquier zona a su alrededor y por motivos diferentes.

De esta forma los que aparecen en la punta de la raíz se conocen como absceso periapical y por lo general se producen por caries que no se han tratado y por lesiones o procedimientos dentales antiguos que han dejado recidiva de caries o filtraciones.

Sin embargo los que se forman en las encías a los lados de la raíz del diente son los llamados abscesos periodontales y se originan por el paso brusco de bacterias a esos tejidos a través de una bolsa periodontal ya existente.

Fracturas dentarias

La ruptura de un diente deja expuestos sus tejidos internos y con ello aumentan las probabilidades de que se produzca dolor de dientes.

Enfermedad de las encías

Estas enfermedades se producen por infección de los tejidos que sostienen los dientes lo cual origina inflamación y deterioro de los mismos.

Por consiguiente se produce dolor, en etapas avanzadas puede ocurrir la pérdida ósea y con ello la caída del diente.

Rechinamiento de los dientes

Algunas personas suelen rechinar o apretar los dientes de manera excesiva, a lo que se le conoce como bruxismo.

Este mal hábito por lo general deteriora los tejidos del diente, sobre todo el esmalte, haciéndolos sensibles al dolor.

En etapas posteriores llega a afectar los tejidos de soporte del órgano dental debido a la fuerza constante sobre ellos, lo que también puede desencadenar episodios dolorosos.

Aparatos dentales mal colocados

Cualquier tipo de aparato dental ya sea una prótesis, coronas, brackets o un implante debe estar bien colocado, cualquier imperfección en ellas puede originar dolor de dientes.

Brote de los cordales

Por ser los últimos en brotar los terceros molares conocidos como muelas del juicio o cordales suelen originar mucho dolor sobre todo cuando no hay suficiente espacio para ellos en la boca.

Hipersensibilidad dentaria

Cuando el cepillado se realiza de forma brusca, se utiliza una mala técnica o se emplean dentífricos muy abrasivos el esmalte se desgasta dejando expuesta la dentina y con ello aumenta la sensibilidad al dolor.

¿Qué otros síntomas pueden aparecer con el dolor de dientes?

El dolor dental es una señal de que hay algún problema en tu boca, aparece de forma repentina y generalmente se acompaña de otros síntomas.

Por lo general existe mal sabor en la boca y mal aliento cuando hay dolor de dientes, sobre todo si se produce por una infección, incluso puede haber algún tipo de secreción.

Del mismo modo las encías pueden estar enrojecidas, inflamadas y en muchos casos duelen a la palpación.

Por otro lado el tipo de dolor es muy importante a la hora del diagnóstico, ya que puede ser fuerte, constante o intermitente, mientras que otras veces solo duele al aplicar presión sobre el diente.

Además el dolor suele irradiarse a otras zonas de la cavidad bucal, la cara e incluso producir dolor de cabeza y en ciertas ocasiones puede acompañarse de fiebre.

También puede manifestarse ante los cambios de temperatura, como al consumir comidas frías o calientes y al ingerir dulces o alimentos duros.

¿Cómo interpretar el dolor de dientes para un mejor diagnóstico?

Teniendo en cuenta las causas más comunes de dolor en los dientes, resulta muy útil aprender a interpretarlo para así ayudar en el correcto diagnóstico.

Al llegar a la consulta estomatológica lo primero que hace el profesional médico es un interrogatorio para obtener información que junto al examen clínico lo ayudarán a identificar la verdadera causa del dolor.

Cuando este se localiza en un solo diente lo más probable es que tengas una caries, que te hayas fracturado una obturación vieja o el propio diente y tengas filtraciones, aunque también puede indicar que exista algún tipo de infección o inflamación en su interior.

Por otro lado si tu dolor es agudo, es decir fuerte y palpitante en un diente, lo más seguro es que exista un aumento del flujo sanguíneo producto a una infección de la pulpa.

Por el contrario si te dueleal consumir alimentos fríos y calientes, indica que la dentina está expuesta, ya sea por caries, filtraciones o fracturas.

Sin embargo cuando abarca todos los dientes de la boca o de una arcada, podemos estar padeciendo de bruxismo o rechinamiento dental.

También puede deberse a una sensibilidad originada por la erosión del esmalte debido al uso de dentífricos abrasivos.

Además las enfermedades periodontales producen retracción de las encías alrededor de todos los dientes dejando expuesto su cuello, haciéndolos sensibles al dolor.

Enfermedades que pueden causar dolor de dientes

Existen algunas enfermedades que durante su curso pueden producir dolor dental como uno de sus síntomas, pero no tienen nada que ver con la salud bucodental.

Neuralgia del trigémino

Este es un trastorno crónico del nervio trigémino que origina dolor en la cara que puede ser moderado o intenso y se produce al hablar, masticar, cepillarse los dientes, incluso maquillarse.

Se describe como un dolor espontáneo, punzante y agudo que se presenta en forma de episodios que pueden durar unos pocos segundos hasta varios minutos y luego repetirse a los días, semanas o meses.

Requiere tratamiento médico, aunque este padecimiento es para toda la vida y dentro de sus síntomas aparece un dolor facial que abarca las zonas inervadas por el trigémino, incluidos los dientes.

Angina de pecho

Esta alteración constituye un síntoma de una arteriopatía coronaria y no es más que un dolor de pecho que ocurre al llegar poca sangre al corazón.

Cuando sucede suelen aparecer otros síntomas como dolor en el cuello y la mandíbula, reflejándose este último en los dientes inferiores.

Sinusitis

Esta afección se produce generalmente después de un resfriado y consiste en la inflamación de los senos paranasales.

Debido a su proximidad con los molares superiores, se puede producir una sensación de presión y dolor sobre estos que se acompaña además de congestión y secreción nasal, debido a la acumulación de moco en su interior.

Los descongestionantes nasales ayudan a limpiar la nariz y los senos paranasales, pero mientras estén inflamados existirá dolor de dientes, por lo que se debe tomar analgésicos y antiinflamatorios de venta libre para aliviarlos.

Otitis

Esta enfermedad consiste en la inflamación del oído interno, que se acompaña generalmente de una infección, causando intenso dolor.

Por la proximidad que tienen los oídos con la mandíbula cuando se padece de esta enfermedad suele irradiarse el dolor hacia los dientes.

Aunque esta infección también puede desaparecer por sí sola serían muy útiles los analgésicos y los antibióticos que pueda indicar el especialista.

Si te duele el oído, padeces de sinusitis o tienes dolor en el pecho conjuntamente con dolor de dientes, no dudes en acudir al médico para descartar las causas y así tener un tratamiento eficaz y oportuno de la enfermedad que presentas.

Dolor de dientes por estrés

Es conocido por todos las terribles consecuencias que trae consigo el estrés para la salud de nuestro cuerpo en general y la boca forma parte de ello.

Cuando estamos sometidos a situaciones estresantes de la vida se produce una tensión constante sobre los músculos de la cara y los que soportan la articulación temporomandibular (ATM) que es la que realiza la función de bisagra de ambos maxilares.

Esta tensión causa contracción de dichos músculos originando que ambas arcadas dentarias se aprieten más de lo normal causando un aumento de la fricción entre los dientes, que es lo que se conoce como bruxismo.

De esta manera se desgastan tanto el esmalte como la dentina dejando sensible a los dientes para que se produzcan lesiones en los mismos, además del daño que se produce en la ATM, causando ambos dolor en los dientes.

Pero el estrés también es el responsable en muchos casos de las caries dentales, debido a que esta condición baja las defensas del cuerpo y al mismo tiempo disminuye la producción de saliva.

En consecuencia se produce sequedad en la boca que dificulta la función de autolimpieza de la saliva, aumentando así la acidez bucal y con ello la aparición de caries.

Por otro lado estas mismas condiciones suelen desencadenar las enfermedades periodontales y agravar las ya existentes al disminuir la resistencia a las bacterias bucales.

De igual forma cuando estamos estresados solemos despreocupar la higiene bucal y aumentar el consumo de alimentos ricos en carbohidratos y grasas, así como incrementar el hábito de fumar en el caso de quienes lo practiquen, agravando más las condiciones.

El dolor de dientes en este caso es un signo de que el estrés ha producido un daño en nuestra boca, que si se corrige rápidamente pudiera ser reversible.

Si te encuentras nervioso o con demasiada carga laboral recurre a otras alternativas de relajación como la práctica de ejercicios físicos, el yoga, la meditación y en otros casos es necesaria la valoración de un psicólogo.

Remedios caseros para el dolor de dientes

remedios caseros para el dolor de dientes

Este dolor tan desesperante puedes aliviarlo en casa con algunos remedios que están al alcance de todos, y más si aparece durante la noche y debes esperar hasta que amanezca para acudir a la clínica dental.

Estos remedios son efectivos para eliminar momentáneamente el dolor pero la verdadera causa solo debe ser tratada por el odontólogo, así que aunque te alivies no demores en pedir cita.

Limón

Por su poder antiséptico este cítrico es muy útil contrarrestando las infecciones dentales que conllevan a sentir dolor.

Exprime un limón hasta obtener el zumo, utilízalo puro o diluido en agua para hacer buchadas, también puedes adicionarle una pizca de sal para potenciar su efecto.

El mismo resultado lo lograrás si chupas el limón de forma que se absorba su jugo por la zona afectada.

Debes usarlo con precaución por el efecto de los ácidos sobre el esmalte, además porque si tienes hipersensibilidad dentaria, empeoraría aún más el dolor de dientes.

Agua con sal

Disolver una cucharadita de sal en un vaso de agua tibia y hacer buchadas es un remedio tradicional muy efectivo para las aftas y las infecciones bucales gracias al efecto antiséptico y al amplio poder curativo del sodio.

Además en el caso de los abscesos bucales ayuda a coleccionar y a drenar el pus existente, baja la inflamación y por tanto calma el dolor.

Si sospechas que tu dolor dentario es provocado por algún tipo de infección no dudes en preparar tu propio enjuague bucal casero y verás pronto los resultados.

Sal y pimienta

La pimienta tiene propiedades similares a la sal en las infecciones, por lo que juntas potencian sus efectos.

Lo único que debes hacer es mezclar la sal con pimienta y agua, hasta hacer una pasta que luego aplicarás sobre el diente en cuestión, déjalo actuar unos minutos y repítelo varias veces al día hasta aliviarte.

Clavo de olor

Por las propiedades antiinflamatorias, analgésicas y anestésicas de esta especia la podemos emplear en el tratamiento del dolor dental.

Lo primero que debes hacer es machacar unos clavos de olor y adicionarle aceite de oliva o de cualquier otro vegetal hasta obtener una mezcla que aplicarás con la ayuda de un algodón sobre el diente afectado.

De igual forma puedes disolver en un vaso de agua unas gotas de aceite esencial de clavo de olor y hacer buchadas varias veces al día para lograr el mismo resultado.

Bicarbonato de sodio

Esta sustancia no solo sirve para blanquear tus dientes sino que también puedes emplearla en el alivio del dolor de dientes, sobre todo cuando están inflamadas las encías.

Solo disuelve una cucharadita de bicarbonato de sodio en 1 vaso de agua tibia y realiza buchadas varias veces al día.

También puedes aplicarlo en forma de pasta sobre el diente en cuestión, mezclando el polvo con unas gotas de agua y apoyándote de un algodón o aplicador estéril.

Perejil

Masticar unas hojas de perejil fresco, previamente lavadas te ayudará a aliviar este dolor y muchas veces lo eliminará por completo en dependencia de la causa.

Esto se debe gracias a las propiedades analgésicas, antinflamatorias y antibacterianas que posee esta planta aromática que usamos como condimento de las comidas.

Manzanilla

Por su acción sedante, antibacteriana y antinflamatoria puedes usar la infusión de manzanilla para aliviar esta afección, sobre todo en el caso de los abscesos o flemones.

Solo debes consumir una tasa en ayunas y la otra antes de acostarte incluso combinado con el zumo de limón para que potencies su efecto.

También utilizarlo en forma de buchadas 2 o 3 veces al día priorizando la zona afectada, será igual de efectivo.

Té negro

El ácido tánico presente en este tipo de té es un excelente analgésico y antinflamatorio capaz de aliviar el dolor de dientes.

Prepara la infusión añadiendo una bolsa de té en el agua y una vez que se refresque saca la misma y colócala directamente sobre el área adolorida.

Cebolla

Este condimento puede ser empleado en estas circunstancias por ser antibiótico y antiinflamatorio, por lo que debes cortar un trozo y colocarlo en la zona afectada.

Pero si te agrada su sabor puedes masticarlo y así combatirás más rápido la infección y aliviarás el dolor.

Enjuagues con alcohol

Esto solo debes hacerlo con el alcohol utilizado en las bebidas, nunca el que empleas en la cura de heridas porque puede producirte quemaduras.

Realiza buchadas con whisky, vodka, tequila o aguardiente en pequeñas cantidades lo que se absorberá por las encías anestesiando y desinfectando a su vez la zona.

Ajo para el dolor de dientes

Gracias a las propiedades antibióticas y antinflamatorias del ajo lo podemos utilizar en múltiples afecciones del cuerpo incluido el dolor dental.

Para ello solo debes pelar un diente de ajo, cortar una lasca y colocarlo unos minutos sobre la muela o el diente que te duela, incluso dentro de la cavidad de caries, si es el caso, aunque también puedes masticarlo.

Te sorprenderá el poder anestésico que tiene sobre el nervio dentario, sobre todo para los dolores leves a moderados.

Aunque es muy efectivo debes saber que deja un olor fuerte que puede que no sea de tu agrado, pero créeme a veces es preferible eso antes que sentir ese terrible dolor.

Alivia el dolor de dientes con hielo

alivia el dolor en los dientes con hielo

Por lo general el dolor dentario se acompaña de algún tipo de inflamación y a veces de un flemón y aumento de la temperatura de la zona producto a la infección.

Cuando esto ocurre puedes colocar en la mejilla del lado del dolor una compresa de agua fría o unos cubitos de hielo envueltos en una toalla.

Realiza esto durante 15 minutos varias veces al día y poco a poco disminuirá la inflamación y con ello el dolor, pero nunca apliques el hielo directamente sobre la piel, encía o el diente porque podría resultar peor.

¿Cómo prevenir el dolor de dientes?

como prevenir el dolor en los dientes

La mejor forma de curar es prevenir y este tipo de dolor claramente puedes evitarlo si llevas a cabo una serie de medidas en tu quehacer diario, como por ejemplo:

  • Cepíllate correctamente los dientes después de las comidas con dentífrico fluorado.
  • Usa el hilo dental al menos una vez al día para eliminar los restos de alimentos entre los dientes.
  • Reduce en tu dieta los alimentos azucarados ya que aumentan las probabilidades de caries.
  • Evita los alimentos de consistencia dura que podrían fracturar tus obturaciones.
  • Si practicas deporte utiliza los medios de protección bucal necesarios para evitar las fracturas dentarias.
  • Practica ejercicios físicos o técnicas de relajación para evitar el estrés que puede desencadenar enfermedades bucodentales.
  • Visita al odontólogo cada seis meses para detectar a tiempo las patologías que puedan ocasionarte dolor de dientes.
¡Te Recomendamos!

Average rating 0 / 5. Vote count: 0

No votes so far! Be the first to rate this post.

Deja un comentario